Los escritorios de pie cada vez se ven en más casas y en los espacios de trabajo en oficinas. Estar sentado un largo periodo de tiempo cada día tiene un impacto negativo en la salud. El cuerpo necesita movimiento, mantenerse activo, y lo consigues si estás erguido durante buena parte de tu jornada laboral.
Los efectos nocivos del sedentarismo son ampliamente conocidos. Si te mantienes sentado tienes mayor riesgo de padecer obesidad, diabetes o enfermedades cardiovasculares.
Un escritorio de pie aporta movimiento mientras estás trabajando, estiras músculos y cambias de postura, aportando un factor de ergonomía indispensable.
Permanecer erguido en lugar de sentarse proporciona que se quemen calorías, como confirman los estudios. No se quema tanto como cuando se efectúa ejercicio, con sesiones de correr o simplemente caminar, pero sí que produce un gasto de energía que favorece no aumentar de peso.
Un escritorio de pie aporta beneficios para la salud y la productividad, especialmente los que son ajustables y puedes permanecer tanto erguido como sentado, dando la oportunidad de estar en las dos posiciones.
Es recomendable evitar mantenerse levantado durante toda la jornada laboral. Se aconseja de inicio ir aumentando gradualmente el tiempo, porque si pasas de estar todo el día de sentado a de pie pueden aparecer problemas físicos como dolor de espalda, piernas y pies.
Para adquirir una mesa elevada valora tus necesidades. En el mercado encuentras modelos de todo tipo y precios, que varían según sus características, si son ajustables para estar en diferentes alturas y el sistema que usan si es manual o eléctrico.
Razones para utilizar un escritorio de pie
Tener una superficie adecuada para trabajar es esencial. Para acabar con los hábitos sedentarios planifica tus días, y una manera es la de permanecer erguido mientras realizas las tareas profesionales. La ventajas que aporta este mueble son:
Mayor productividad
Hay un aumento del rendimiento. Se produce una mejora en la concentración porque se origina un incremento del flujo de la sangre en el cerebro, en cambio cuando tienes un comportamiento sedentario esta circulación se reduce.
Como en el caso de una mesa en el que trabajas sentado, es necesario tomar descansos cada cierto tiempo para despejarse y poder continuar con las tareas.
Muchas personas notan que cuando trabajan en un escritorio de pie pierden menos el tiempo y son más productivas, ven aumentado su rendimiento, ponen más foco en lo que hacen y fomenta la creatividad.
Mejora la postura
Mantener una postura corporal correcta es básico para no tener problemas musculoesqueléticos. Cuando estás sentado ante el ordenador durante horas corres el riesgo de curvar la columna vertebral y los hombros, provocando que puedan aparecer molestias, dolores y lesiones.
Una mesa de pie permite mantener la espalda más recta con los hombros hacia atrás. En los 2 casos es necesario ser conscientes de la posición y corregirla si no es la adecuada.
Pérdida de peso
Cuando estás erguido tienes un mayor gasto de calorías porque utilizas más energía por tener que mantenerte en pie. Esta circunstancia acelera el metabolismo, exige más a los músculos y las articulaciones y se produce un mayor flujo sanguíneo.
La quema de calorías suplementarias, aunque no sean demasiadas, si se multiplican con el paso de los días, semanas y meses suman un número elevado en comparación a si no se hace, ayudando a combatir la obesidad.
Positivo para la espalda
Cuando acumulas horas y días sentado la espalda se resiente, además que los músculos abdominales se ven debilitados. En cambio de pie esta zona es la que sostiene las lumbares y tienen que trabajar.
También desarrollas una mejor circulación y se producen menos puntos de presión en la espalda. Es recomendable ir cambiando de posición y tomar descansos.
Estás más enérgico
Las personas que están de pie mientras trabajan se sienten con más energía respecto a los que realizan las tareas profesionales sentadas. Por consiguiente también provoca que mejore el estado de ánimo y el bienestar general. Permite tener un estilo de vida activo y te sientes más ágil.
Cuando estás levantado generalmente no sueles estar parado, ya que las personas se mueven, estiran, las hay que hasta bailan o siguen el ritmo de la música si trabajan con ella.
Ganas en flexibilidad
Una mesa regulable, con la que compaginas el tiempo de trabajo con periodos sentado y otros erguido, aporta elementos saludables y poner fin a tendencias sedentarias.
Es un mueble que proporciona estar activo durante la jornada laboral y ganar en flexibilidad. La capacidad de movimiento de articulaciones y músculos reduce el riesgo de que se produzcan lesiones.
Reduce riesgos en la salud
Realizar actividad física evita que se produzcan enfermedades relacionadas con el sedentarismo. Mantenerte de pie proporciona tener una vida más saludable porque el cuerpo está trabajando de forma constante.
Las investigaciones demuestran que estar sentado diariamente durante horas y tener un estilo de vida sedentario aumenta las posibilidades de tener una enfermedad del corazón, algunos tipos de cáncer, colesterol elevado o diabetes, porque estar sentado durante periodos largos de tiempo reduce el metabolismo de las grasas y azúcar. Si te mantienes activo se produce un aumento de la esperanza de vida.
Consejos de uso de los escritorios de pie
Para que la jornada laboral sea productiva y el cuerpo no sufra ningún problema, la mesa debe cubrir las necesidades del usuario. Si es ajustable permite estar en más de una posición.
Ten en cuenta las tareas que tienes que realizar porque hay actividades que es mejor llevarlas a cabo sentado, ya que piden más precisión. Para utilizar un escritorio de pie valora el uso que le das.
Ajusta la altura del escritorio
Es importante desarrollar una buena posición mientras trabajas con un escritorio de pie ergnómico. Por este motivo debes regular la altura para tener una posición cómoda y saludable para el cuerpo.
La superficie es recomendable que quede a la altura de los codos, formando un ángulo de 90 grados respecto el suelo.
El monitor procura tenerlo a una distancia adecuada, entre 50 y 70 centímetros y que esté ligeramente inclinado para favorecer el confort visual. La parte superior de la pantalla debe quedar a la altura de los ojos.
Combina estar sentado con de pie
Aunque sea más saludable mantenerse de pie, no significa que todo el día debas estar erguido. También puedes estar sentado para trabajar. Alterna las dos posiciones a lo largo de la jornada.
Demasiadas horas seguidas levantado puede presentar complicaciones físicas, como dolores lumbares o de piernas y pies.
Adecúa el teclado y el ratón
Trabajar muchas horas con el ordenador, escribiendo en el teclado y utilizando el mouse, provoca que puedan surgir dolores y lesiones por movimientos repetitivos.
Los problemas físicos en muñecas y brazos se previenen con una buena posición del teclado y el ratón. Las muñecas deben quedar rectas al escribir. Utiliza un soporte ajustable si es necesario.
Utiliza una alfombra antifatiga
Con el objetivo de no cansarse excesivamente cuando te sostienes erguido durante tiempo usa una alfombra antifatiga, porque estimula movimientos de los músculos de las piernas, mejora el flujo sanguíneo y previene el cansancio.
Toma descansos
Tanto si estás sentado como de pie, siempre es importante tomar descansos cada cierto tiempo durante la jornada laboral. Estas interrupciones permiten despejar la cabeza, separar la vista de la pantalla, moverte y estirar los músculos. Realizarlos es muy positivo, ayuda a conseguir un buen rendimiento y alejar la fatiga física y mental.