Cuando no lo estás utilizando, ¿es mejor apagar o suspender el ordenador? Es una pregunta que te haces por varios motivos, ya sea por razones de consumo energético como para el cuidado del hardware del dispositivo informático.
A las computadoras de sobremesa y portátiles es preciso realizarles un mantenimiento y darles buen uso por la cantidad de horas que están en funcionamiento a pleno rendimiento. En el teletrabajo son una herramienta clave.
Las configuraciones de los aparatos tienen que ser las adecuadas para asegurar su funcionalidad y alargar la vida útil. Por este motivo es debes tener el ordenador adaptado a tus necesidades.
¿Qué es el modo de suspensión de un ordenador?
El modo de suspensión es un sistema que tiene el ordenador para ahorrar energía cuando no se está usando. Los archivos, software, páginas web, extensiones y resto de datos que estás utilizando quedan almacenados en la memoria RAM, que se ejecuta en su estado de bajo consumo.
En un portátil es lo único que gasta batería. Otros componentes como el disco duro o el procesador quedan apagados. Aunque se consuma toda la batería, la sesión queda guardada y se puede recuperar una vez se enchufe a una toma de corriente.
Cuando vuelves a poner el dispositivo en actividad todo con lo que estabas trabajando permanece abierto. No tienes que preocuparte sobre si perderás información, datos o archivos de la sesión. El software y el hardware vuelve a activarse si tocas el mouse o el teclado. En un laptop puede ser que necesites tocar el panel táctil o el botón de encendido, que se encuentra parpadeando.
¿Cuál es la diferencia entre suspender y apagar el ordenador?
Existen diferencias evidentes entre el estado de suspensión y apagar el ordenador.
Tiempo de arranque
El modo suspensión permite que el inicio sea mucho más rápido porque la sesión queda guardada en la memoria RAM y comenzar en el mismo punto donde lo dejaste.
Si enciendes el dispositivo después de apagarlo el tiempo de espera para comenzar es superior porque debe ponerse en marcha el sistema operativo, el software y los componentes. Especialmente si tienes configurados los programas para que se pongan en marcha en el arranque.
Consumo energético
Cuando apagas el ordenador se produce un ahorro de energía, pero no es demasiado en comparación al modo de suspensión. La diferencia se estima entre 1 y 2 vatios durante la noche. Cuando apagas el dispositivo informático no consume energía RAM.
Si quieres que no gaste nada de electricidad además debes desconectarlo de la toma de corriente, porque un aparato electrónico aunque no esté funcionando gasta una pequeña cantidad de energía si se mantiene enchufado.
Guardar los archivos
Si decides apagar el ordenador asegúrate de guardar todos los archivos, documentos e información que desees mantener. Si no lo grabas lo perderás, aunque hay maneras de recuperarlo.
En cambio, con la suspensión se mantiene la sesión y vuelves al punto donde lo dejaste antes que se pusiera en reposo.
¿Qué es mejor apagar o suspender el ordenador?
La respuesta a esta cuestión no es otra que depende del uso que le des. Ten en cuenta algunos parámetros de tu jornada de trabajo para decidir si es mejor una opción u la otra.
Tiempo de uso
Si durante horas no vas a utilizar el dispositivo, como por ejemplo durante la noche, lo más adecuado es que te decidas por apagarlo. En cambio, si vas utilizando la computadora en diferentes periodos durante todo el día la elección debe ser ponerlo en suspensión.
Ciclo de vida
Todo hardware tiene un desgaste y un tiempo de vida útil finita. Depende de diferentes factores, desde la calidad de los materiales hasta la utilización que ha tenido y el trato que se ha dado a la máquina.
Encender y apagar la computadora repetidamente provoca un desgaste en los componentes y puede afectar al mantenimiento con el paso del tiempo. Cuando está en suspensión la memoria RAM funciona, por lo que también tiene que trabajar.
Efecto del calor
El calor producido cuando está en reposo hace que incida sobre el hardware, aunque el dispositivo no se encuentre a pleno rendimiento, que es cuando las temperaturas en el interior son más elevadas.
Ya se sabe que el calor es un enemigo de la informática y acorta el tiempo de vida útil, además de poder producir daños graves si se ocasiona un sobrecalentamiento.
Reinicio reparador
Apagar el ordenador permite que cuando lo vuelvas a encender queden eliminados problemas técnicos de poca importancia pero que es necesario que se resuelvan, como errores del sistema, software y memoria.
Si no se para estas incidencias se van acumulando y afecta de forma directa al rendimiento del dispositivo informático.
El reinicio proporciona no solo que la máquina se enfríe, sino que los componentes y programas vuelvan a la actividad. Cuando se encuentran en suspensión se están ejecutando en segundo plano.
Qué hacer si no te aparece suspender en el botón de inicio
Si cuando pulsas el icono de Windows no te aparece la opción de suspensión tienes una manera fácil de solventar la incidencia. Pulsa las teclas Windows + R y te aparecerá la ventana de Ejecutar en la que debes escribir powercfg.cpl. A continuación clica en Aceptar.
En Opciones de energía clica en el apartado Elegir el comportamiento del botón de inicio/apagado que se encuentra a la izquierda. Pulsa en Cambiar la configuración actualmente no disponible. En la sección de Configuración de apagado marca la casilla Suspender para que se muestre en el menú Iniciar/Apagar. Ya solo queda haga clic en Guardar cambios.
En un ordenador portátil también tienes la posibilidad de poner el modo de suspensión cuando pulsas el botón de encendido y cierras la tapa. Se encuentra en este mismo apartado de Elegir el comportamiento del botón de inicio/apagado.
En Configuración del botón de inicio/apagado y la tapa elige en los desplegables que aparecen la opción de Suspender en los apartados de Batería y Con corriente alterna tanto en Al presionar el botón de inicio/apagado como el de Al cerrar la tapa. Posteriormente pulsa en Guardar cambios.
Cómo cambiar el tiempo para que el ordenador se ponga en modo suspensión
Si quieres cambiar el período de tiempo para que el ordenador esté en modo suspensión debes ir a Configuración. La manera de hacerlo es o bien en el icono de Windows pulsar en la ruedecita, o en el buscador del sistema operativo escribir Configuración y seleccionarlo cuando te aparece.
Una vez dentro clica en Sistema y en el menú que aparece a la izquierda en Inicio/Apagado y suspensión. En los apartados de Pantalla y Suspender tienes desplegables para escoger el tiempo que quieres que se ponga en suspensión cuando no lo estás utilizando. En un portátil puedes hacerlo Con batería y Cuando está enchufado.
Tienes diferentes opciones tanto en minutos como en horas. También la posibilidad que no se ponga nunca en este estado.
