Una home office debe reunir las mejores condiciones para trabajar desde casa. Una buena silla de oficina, el mobiliario que la confecciona y el entorno del lugar donde se encuentra situada son elementos importantes para que la concentración y la productividad estén siempre presentes.
Una silla ergonómica de escritorio es básica para tener la comodidad necesaria para pasar horas sentado y que la postura corporal sea la adecuada en todo momento. El mantenimiento de todo el material utilizado también es un aspecto relevante. Uno de ellos es la limpieza de la silla de oficina.
Existen multitud de modelos y diseños, además de materiales con los que está elaborada, como cuero natural o sintético, tela, microfibra o malla. Además están compuestas por elementos hechos de plástico, poliuretano o aluminio. Todos estos componentes necesitan un cuidado por razones de higiene y para que sean más duraderos.
Durante el día se acumula suciedad de todo tipo, como polvo, pelos y migas, además de ser un hervidero de gérmenes y alérgenos. Por este motivo es tan importante mantener una limpieza regular.
Puedes mantenerla pulcra con los productos de limpieza que acostumbras a tener en casa. Una aspiradora, jabón para limpiar los platos de fórmula suave, spray, paños de microfibra, una camiseta vieja de algodón, un plumero o una lata de aire comprimido son artículos que dan buenos resultados.
Para una limpieza más profunda puedes utilizar alcohol isopropílico, vinagre o detergente para manchas difíciles, siempre atendiendo que no sea perjudicial para el tipo de superficie donde se pone. Para no degradar la tapicería es preciso que no le toque la luz del sol directa.
¿Cuándo limpiar una silla de oficina?
En el teletrabajo pasas la mayor parte del día sentado ante la mesa. Es necesario asear la silla de despacho de manera regular, aunque la regularidad de limpiar depende de la frecuencia de uso. Como mínimo debes hacer un mantenimiento semanal.
Mantener limpia la oficina en casa favorece a que no se ensucie tanto la silla, especialmente las ruedas, que por acumulación de porquería presentan dificultades para rodar.
Cuando se produzca una mancha debes actuar rápidamente después que se haya producido un derrame de algún líquido o sustancia. Utiliza agua o una solución con jabón, y déjalo secar al aire, en un sitio con buena ventilación. Como más te apresures a lavar menos posibilidades hay que deje una mancha permanente.
¿Qué significan los códigos de limpieza en una silla?
Cualquier superficie del hogar necesita un cuidado. La silla de escritorio no es ninguna excepción. Fíjate en la etiqueta del fabricante, que suele estar debajo el asiento, porque te aporta las instrucciones de limpieza de la tapicería.
Verifica el código, que está compuesto por 1 o 2 letras, que indican cual es la mejor solución de lavado.
W: limpiar con agua, que se puede mezclar con unas gotas de jabón para platos, o un producto con base de agua.
S: no se le puede aplicar agua. Debe hacerse con solventes de limpieza en seco.
S/W: se puede higienizar con productos a base de agua y con solventes de limpieza en seco.
X: solo es posible utilizar un aspirador o cepillarlo.
¿Cómo limpiar una silla?
Para tener claro cómo limpiar la tapicería de una silla de oficina, ten en cuenta estos consejos para el momento que se produzca una mancha:
- Actúa rápidamente: no dejes que la mácula se expanda tanto si se ha derramado un líquido sobre la tapicería como un elemento sólido. Cuanto más esperes a retirarlo más costará quitarlo.
- Asegúrate cómo limpiar: verifica el código de la silla para saber la manera de efectuar el saneamiento y los artículos que debes usar para que no se produzca ningún deterioro de la tapicería.
- Realiza una prueba: antes de utilizar el producto para limpiar, efectúa una comprobación en un lugar pequeño de la silla y a ser posible que quede escondido. De esta manera te aseguras que el método de higiene es el correcto y que no se produce ningún cambio de color o textura.
- Déjalo secar: una vez finalizado el proceso deja que se seque de manera natural. Deposita laen un lugar que tenga una buena ventilación para que quede bien seca de manera natural, sin que utilices ningún aparato.
Métodos de limpieza
Existen varios tipos de tapicería y cada una necesita su cuidado particular. Los materiales no tienen las mismas características y deben seguirse las instrucciones para que no sufran ningún deterioro ni permanezca ninguna señal de suciedad.
En todos los casos aspirar el polvo de la silla de forma regular a baja potencia, sin dañarla, proporciona pulcritud y que no se vea desmejorada a simple vista.
Limpiar silla de cuero
Existen diferentes tipos y lo más conveniente es usar limpiadores específicos para cuero. Para sanear la silla de cuero utiliza un aspirador a baja potencia para no dañar la tapicería o un trapo seco que no deje pelusa. No hagas movimientos en los que restriegues.
No utilices agua porque se filtra a través de los poros y se puede agrietar. Si hay una mancha que no se va emplea como remedio alcohol isopropílico en un paño. Después pasa un trapo seco para quitar la humedad.
Para el cuidado del cuero sírvete de un acondicionador, para emplearlo de vez en cuando porque hidrata la tapicería y la protege de la sequedad, para que no se agriete ni se produzca ningún desgarro.
Limpiar silla de tela
Si ocurre un derrame que produce una mancha lo más apropiado es poner unas gotas de jabón con agua tibia en un cubo pequeño y limpiar de manera suave con un paño humedecido, no mojado, para que no quede empapada. Los movimientos tienen que ser de fuera hacia dentro para no esparcir la mácula.
Después pasa un trapo humedecido solo con agua para enjuagarlo y eliminar cualquier residuo de jabón. Pasa por encima un paño seco y deja secar al aire. Las manchas se pueden tratar con alcohol isopropílico si el jabón de platos no es suficiente.
Como solución casera está esparcir bicarbonato en polvo sobre la mancha, dejar que actúe durante unos minutos y retirar con un trapo. También se pueden utilizar polvos de talco, que tienen propiedad absorbente.
Limpiar silla de malla
Ofrece ventilación porque pasa aire entre el tejido, que comporta que se produzca menos sudor en la espalda y por lo tanto, que se ensucie menos. Primero aspira el asiento y el respaldo. A continuación frota la mancha con agua tibia con jabón y un paño. Refiega la zona con movimientos que no sean fuertes.
Si no funciona emplea una solución de quitamanchas suave, siempre sin frotar para que la malla no sufra ningún desperfecto y se deshilache. Se cuidadoso con la tapicería de malla.
Limpiar patas y reposabrazos
Son accesorios que acostumbran a ser de metal o plástico. Para limpiar las partes duras como las patas o reposabrazos pasa un paño húmedo y después utiliza un trapo seco para no dejar nada de humedad. No emplees ningún producto abrasivo ni estropajos que los puedan rayar.
¿Cómo limpiar las ruedas de una silla de despacho?
Para quitar las partículas de suciedad de las ruedas en una silla de oficina, que afecta a su movimiento, la primera acción a realizar es darle la vuelta. Para no forzar la espalda la mejor opción es que te sientes y desarrolles una postura corporal correcta.
Las ruedas están hechas de plástico, poliuretano, caucho o aluminio. Primero debes quitarlas. Dependerá del modelo, en unos necesitarás un destornillador, mientras que en otros deberás únicamente tirar de ellas o desenroscarlas. También hay ruedas que se pueden desmontar.
Con una aguja larga o un cuchillo raspa los residuos sólidos que estén incrustados que no dejan que rueden correctamente. Pásalo a través de las ranuras y todos los rincones.
Hay trucos para quitar los pelos de las ruedas de la silla de oficina. Además de un objeto punzante puedes cortarlos con unas tijeras y después usar unas pinzas.
Posteriormente pasa un paño húmedo para acabar de quitar la suciedad. Sécalas con un trapo seco, procura que no quede humedad y vuélvelas a colocar.
Si utilizas un lubricante de aerosol para que rueden asegúrate de limpiar si hay un exceso de producto para que no se adhiera ninguna partícula que pueda afectar al rodamiento. Vuelve a dar la vuelta a la silla para finalizar.
Cómo quitar el mal olor de una silla
Es un lugar donde pasas muchas horas. Necesitas estar cómodo y a gusto, además que nada te distraiga para que no afecte al rendimiento. La acumulación de tiempo sentado y las costumbres ante el ordenador marcan el estado de la silla de escritorio.
Quedan impregnados olores que son desagradables, que se manifiestan por el sudor, si en la casa hay niños o mascotas, si fumas en la habitación, o comes en el escritorio y se mancha la tapicería porque cae algo de comida.
Existes trucos para eliminar los malos olores de una silla. Hay diferentes soluciones naturales para conseguirlo si el respaldo y el asiento huele desagradable. Estos productos desinfectan, quitan gérmenes y bacterias.
- Vinagre blanco: mezclado con agua tibia quita el mal olor y además también desinfecta. Utiliza un atomizador para repartirlo por la superficie y déjalo secar.
- Amoniaco: mézclalo con agua tibia y usa un atomizador para esparcirlo. También tiene funciones de higiene de desinfección. Déjalo secar una vez diseminado por la tapicería.
- Bicarbonato de sodio: extiéndelo por la superficie de la silla y que pasen unas horas. Después pasa por encima la aspiradora para recoger todo el producto.
Es importante que para que no se produzca mal olor haya una buena ventilación en la habitación donde se encuentra y que no se acumule humedad.