El escritorio es un lugar muy personal. Tal y como lo tienes revela aspectos de tu personalidad y ritmo de trabajo. El desorden en la mesa es fácil que se produzca a causa de la actividad y se reúne un cúmulo de objetos puestos de cualquier manera que pueden afectar a la productividad.
El estado de organización de la mesa de trabajo puede mostrar muchas cosas. Como de organizada o desorganizada es la persona, si procrastina acciones como despejar el escritorio, si es creativa o perfeccionista.
Aunque la impresión del orden y la limpieza son visiones subjetivas, porque para lo que para unos es un lugar organizado y limpio, para otros no. Un escritorio desordenado no tiene por qué ser negativo, pero los demás sí que lo pueden percibir así.
No significa que seas una persona descuidada, pero puede dar la impresión. Además la gente no sabe si verdaderamente eres desaliñado, si es con carácter general o puntual por alto volumen de trabajo o simplemente no has tenido tiempo de organizarlo.
La imagen típica del desorden es tenerlo todo desperdigado sobre la mesa, un espacio de trabajo lleno de objetos sin ningún orden aparente. Aunque muchas personas se sienten cómodos con esta desorganización, ya que les aporta creatividad. Para algunos es una fuente de inspiración estar en este ambiente.
Pero generalmente provoca distracciones porque no encuentras las cosas. Gastas energía y tiempo para hallar material de oficina, libros, documentos, dispositivos electrónicos, carpetas, archivadores o papeles. También tiene otros efectos como problemas para moverte y realizar una mala postura corporal.
Un escritorio organizado mejora la productividad y la concentración, porque la superficie está despejada, todo está a mano y a la vista. Trabajas con mayor comodidad, sin que nada te moleste o distraiga. Eres más eficiente.
Para no acumular cosas sobre la mesa, procura al final del día despejarla y así empiezas la siguiente jornada sin nada que moleste.
Descubre lo que el desorden en el escritorio dice de ti
Un escritorio desordenado proporciona información sobre la personalidad y características del individuo. Da pista de como es, cómo trabaja, rasgos de personalidad y hasta si se siente abrumado por las responsabilidades.
Va bastante por el carácter y la disciplina. Hay personas que aunque empiecen la jornada con todo limpio, a los 5 minutos ya tiene toda la superficie de la mesa ocupada. Algunos hasta tienen la capacidad de encontrar algo en cualquier lugar.
La imagen que transmites es de:
Desorganización
Demuestra que la persona tiene dificultades para ordenar y organizar, que tiene como consecuencia que retrase tareas y no cumpla con los plazos marcados. Esta circunstancia supone un perjuicio respecto a asumir responsabilidades.
Muestra que eres desordenado y poco disciplinado, que lo dejas todo en cualquier sitio y eres incapaz de guardarlo o devolverlo a su lugar de origen.
Poco cuidadoso
Pone al descubierto que la persona es desordenada y que no se preocupa en tener el área de trabajo limpia y ordenada.
Además en algunos casos hasta puede parecer que es poco aseado y no le importa la falta de higiene en el lugar.
No es una prioridad
Expone que estás por otras tareas, no quieres ocupar tu tiempo organizando. En tu lista de prioridades no se encuentra nunca la de ordenar el escritorio.
Procrastinación
Se presenta com una señal de procrastinación, porque decides dejar para más tarde la tarea de ordenar. Es una señal que eres perezoso.
Creatividad
Puede ser un signo que la persona es creativa, ya que acumular objetos le aporta inventiva, con todo un elenco de formas, colores, dimensiones y texturas sobre la mesa. Indica que desarrolla el pensamiento creativo, está abierto a ideas nuevas y abrirse a la imaginación.
Beneficios de tener una mesa ordenada
Ante un escritorio para trabajar pasas muchas horas sentado. El orden en la home office te proporciona ventajas a nivel personal y profesional.
Mejora la productividad
Tener la mesa de trabajo organizada y limpia proporciona mayor eficiencia. Reduce enormemente la capacidad para sufrir distracciones porque no encuentras las cosas u otras te molestan para efectuar tus tareas. También mejora la capacidad de concentración.
Ahorro de tiempo
Con un escritorio ordenado no existen problemas para encontrar cualquier cosa que busques. No tienes que remover todo lo que está esparcido para tratar de hallar aquello que buscas, con todo lleno de elementos por el medio que no necesitas y que son molestos. Minimiza el tiempo para esta acción y ganas en rapidez.
Reduce el estrés
Ver toda la superficie llena, con papeles y objetos por todos los lugares, supone una situación estresante para muchas personas. Por lo tanto si está despejada aporta relajación y sentir un mayor control. El desorden puede ser abrumador, hasta llevar a ansiedad en algunas personas.
Más profesional
Mostrar un escritorio organizado y limpio ofrece una imagen más profesional, aunque hagas teletrabajo. Si tienes la familia en casa o una visita, proyectas una apariencia más eficiente. Además ten en cuenta tenerlo todo despejado si realizas una videoconferencia para asuntos laborales, donde debes mostrar siempre la mejor impresión y nunca se sabe lo que puede aparecer en pantalla.
Aporta credibilidad
Mostrar un escritorio ordenado transmite más confianza. Difunde la imagen que eres una persona metódica, cuidadosa y que tienes habilidades de organización.
Más control
Pones de manifiesto que dominas la situación. Sabes dónde está cada cosa, ya sea un documento como cualquier dispositivo o periférico. Representa una habilidad muy destacable en ámbitos de productividad y profesionales.
Mayor claridad mental
Un espacio despejado ayuda a tener una mayor capacidad para pensar con claridad y tomar decisiones acertadas. Estimula y te sientes menos sobrecargado al tener delante un área limpia de objetos.
Consejos para mejorar el orden en el escritorio
La organización te permite mantener el foco y mejorar los hábitos mentales. Debes tener la habilidad de evitar el caos y los efectos del desorden en una persona. Para conseguirlo realiza un conjunto de acciones:
Crear una rutina de limpieza y organización
Dedica unos minutos al final de cada jornada para limpiar y ordenar el escritorio, así para el día siguiente ya está todo dispuesto y no pierdes el tiempo organizándolo todo.
Realizar una lista de tareas y priorizarlas
Confecciona una lista de todas las tareas y decisiones que debes efectuar y priorízalas respecto a diferentes parámetros, como importancia o urgencia. Así te mantienes enfocado en lo que debes hacer y no tienes encima la mesa otros temas.
Limitar los objetos en la mesa de trabajo
Solo debe estar presente en el espacio un número de objetos limitado, aquellos que únicamente necesitas en ese preciso momento para efectuar las tareas laborales. Es una ayuda perfecta para evitar el desorden.
Disponer de un lugar para cada objeto
Para saber dónde lo tienes todo cuando lo necesites es adecuado que todos los elementos que necesitas para trabajar desde casa los tengas siempre en el mismo sitio, así cuando los debes utilizar sabes dónde están y no están esparcidos por cualquier sitio. Cuando terminas de usarlos tienes que colocarlo en el mismo lugar.
Utilizar archivadores y cajoneras
Es la manera de mantener el orden y saber cada cosa donde está. Impulsa la organización. Ten un lugar específico para guardar documentos, dispositivos electrónicos o material de oficina. De esta manera encontrarás aquello que buscas de manera rápida y tendrás despejada la superficie de la mesa.
Usar una libreta o calendario
Las notas que realizas escríbelas en una libreta o calendario si lo quieres hacer a mano. Sean simples recordatorios o apuntes relevantes para completar las tareas, no las elabores en cualquier hoja o post-it que solo hace que acumular papeles o hasta se puede extraviar.
Hacer limpieza regular
Para tener una zona de trabajo limpia, sin polvo ni suciedad, es recomendable que de forma regular se realice una limpieza profunda. Además de ser un lugar más higiénico también promueve el orden.
Tira lo que no necesitas
Es común acumular cosas porque en algún momento se pueden necesitar o no te apetece desprenderte de ellas. Pero es necesario deshacerte de todo lo que no precisas para que no se produzcas aglomeraciones innecesarias y el escritorio se mantenga ordenado.
