Existen un buen número de trabajos que se pueden hacer desde cualquier lugar. Cada vez la cifra es mayor y es manifiesto que hay un cambio de mentalidad en este sentido.
Ya no es un dogma el hecho de tener que estar en la oficina o en el puesto de trabajo físico durante ocho horas al día. Internet y las nuevas tecnologías abren todo un elenco de posibilidades para efectuar tareas a distancia que permiten trabajar en casa.
Las empresas son conscientes de las posibilidades existentes y en la actualidad son más las que en un tiempo atrás apuestan por el teletrabajo.
Si la iniciativa no es por parte de la compañía, esta opción puede surgir desde el propio empleado, ofreciéndose a trabajar desde casa, explicando todos los beneficios que conlleva, que la productividad se mantendrá y hasta puede tener una línea ascendente.
Se trata de convencer a tu superior, y este a los suyos en casa de que tenga. Para que la propuesta se tome en serio debe estar bien argumentada para que la empresa sea receptiva a esta opción que se le presenta.
Hay veces que por tradición o maneras de hacer es complicado que una empresa realice cambios de funcionamiento de este tipo, por lo que la presentación del proyecto debe ser el adecuado y estar trabajada.
Consejos para la propuesta de teletrabajo a la empresa
Una vez tomada la decisión de querer trabajar desde casa, se trata de comprobar si es adecuado poder realizar las tareas laborales en el domicilio propio o desde algún otro lugar. Gracias al desarrollo de la tecnología en la mayoría de ocasiones es posible.
Es el momento de pensar que incluir en la propuesta de trabajo a distancia y preparar una exposición sobre los motivos y ventajas de desarrollar esta modalidad laboral, tanto para la empresa como para el propio empleado.
Preferiblemente se hará por escrito y después ya irá acompañado con una reunión con el supervisor o el responsable de personal. Es un encuentro al que se debe ir preparado, para saber responder a las dudas que puedan surgir y convencer sobre la propuesta presentada.
Es posible que se produzca una negociación, por lo que sin perder el foco es necesario tener la mente abierta. Una manera de presentarlo es que en un principio se produzca de manera parcial, a modo de prueba, compaginando la oficina con la home office durante la semana.
En este período se podrá medir el rendimiento y el funcionamiento. Si el resultado general es positivo posteriormente podrá ser definitivo una vez constatado que la productividad no se ha visto perjudicada.
Pasos a seguir para pedir trabajar en casa
Investiga la política de la empresa y que hace la competencia
De inicio se indagará en la estructura de la propia empresa y si el teletrabajo es una modalidad que se está utilizando o se ha hecho en el pasado. En este caso conocer cuáles fueron los resultados y porque dejó de hacerse.
En la coyuntura que se lleven a cabo en la actualidad en otros departamentos mirar los tipos de acuerdos que se ofrecen. También es importante conocer la opinión del jefe delante la posibilidad de trabajar en remoto.
Define un plan de trabajo y explicar la idea
Es necesario reunir toda la información necesaria antes de presentar una propuesta formal, que será un documento en el que se explica cuál será el funcionamiento en las responsabilidades que se desarrollan y las facilidades que supondrán tanto para el trabajador, como para el jefe y la compañía, resaltando que la productividad no se resentirá e incluso puede ser superior.
El beneficio es para todas las partes. Existen muchos estudios realizados por organismos oficiales que destacan la rentabilidad que supone el teletrabajo, por lo que estos serán un elemento en el que apoyarse.
Expón las ventajas
Es el momento para desglosar todos los beneficios que permite trabajar a distancia. Se subrayará de inicio que la productividad no se verá afectada a pesar que el equipo se encuentre separado.
Por este motivo es importante decir que se valora la interlocución con los compañeros y que existen diferentes vías de comunicación para estar conectado al instante, como por videconferencia, correo electrónico, chat, WhatsApp o llamadas telefónicas. Resaltar en este punto que se es una persona responsable.
Otras ventajas son el ahorro que supone para la empresa el hecho que el empleado no ocupe un puesto en la oficina, los desplazamientos que dejan de producirse, la mayor productividad por menos distracciones, el aumento de motivación del empleado, la calidad de trabajo, la flexibilidad de horario y la conciliación familiar.
Adelántate a los problemas
Siempre se debe estar preparado ante cualquier objeción por parte del supervisor sobre la logística y la capacidad de realizar teletrabajo.
Al principio se pueden presentar contratiempos porque es una manera de funcionar nueva, como las inquietudes que puedan surgir por la productividad, la comunicación o si se cumplirán los protocolos de seguridad como si se estuviera en la oficina en cuanto a la confidencialidad y la protección de datos. Por este motivo se realzará el compromiso hacia la empresa, la comunicación no será problema.
Encuentra el momento
Es básico conocer la situación de la empresa y de las personas encargadas de la toma de decisiones para presentar la propuesta. Debe hacerse en el instante adecuado.
No solo es cuestión de encontrar de buen humor al jefe y soltárselo. Para esto es importante que exista un grado de confianza entre los dos, que te conozca bien, y que sea consciente que eres una persona responsable.
Este tipo de decisiones no se producen al instante, por lo que se trata de trabajar con la idea, que vaya cuajando el concepto, y sugerir hacer una prueba. Mejor hacerlo en persona y no por correo, cara a cara siempre aumenta la confianza.
Detalla la home office
Para que la propuesta tenga un mayor grado de fuerza, quedará definida como será la oficina en casa y todos los elementos necesarios con los que se cuenta, como un buen sistema de wifi, ordenador y el espacio para estar cómodo.
También se especificarán los recursos que se necesitan, como hardware, software, antivirus, herramientas de seguridad o una conexión VPN. El portátil puede ir a cargo de la empresa. Esta y otras son opciones a negociar.
Destaca la conciliación
Otra de las maneras de cómo pedirle a tu jefe teletrabajar es exponer la necesidad de alcanzar una conciliación satisfactoria entre la vida profesional y la personal, subrayando el beneficio que supone para la empresa y el propio empleado, con niveles superiores de productividad.
Sin desplazamientos, en el trabajo remoto el asalariado tiene más tiempo para organizarse y ofrecer un rendimiento adecuado para las tareas laborales a realizar, además que goza de más tiempo para uso personal, tanto a nivel familiar como de ocio.
Este aspecto hace que los niveles de bienestar aumenten en la persona. También es posible proponer nuevos horarios para alcanzar los objetivos de productividad y de conciliación.
Muéstrate flexible
Se trata de convencer al jefe, que al principio se puede mostrar escéptico, por lo que la proposición siempre debe mantenerse abierta para adaptarse a cualquier necesidad.
Es aconsejable ponerlo en contexto y que esta es una nueva manera de trabajar, que lo están haciendo las empresas en el presente y que se irá imponiendo en el futuro.
Dependiendo de las circunstancias concretas, en un principio se puede presentar la posibilidad de hacer teletrabajo de manera temporal o parcial, para después pasar a ser permanente si funciona correctamente.
El supervisor no lo aprobará al momento, deberá estudiarlo o consultarlo con sus superiores para ver si es factible. Una vez conseguido es importante que el jefe vea que va bien.
Por este motivo es vital mantenerse comunicado en todo momento, presentar propuestas atractivas para el proyecto y la empresa. Ser visible porque no se está trabajando uno al lado del otro.