Cuando pensamos en el cuidado del suelo, a menudo nos concentramos en evitar rasguños y daños ocasionados por muebles pesados o movimientos bruscos.
Un elemento cotidiano como las sillas de oficina también tienen un impacto significativo en la salud y la resistencia del área donde se encuentra, ya sea de madera, azulejos, vinilo, alfombra u otros materiales.
El uso provoca un deterioro en la superficie que tiene consecuencias estéticas y económicas en reparaciones, en forma de rayones, hendiduras y marcas permanentes, que afecta directamente su aspecto y durabilidad.
Por este motivo es imprescindible preservar su buen estado protegiendo el espacio y haciendo un buen uso en el desplazamiento del mobiliario.
Cómo elegir sillas de oficina que no causen daños en el suelo
Debes valorar algunos aspectos relevantes para acertar en la elección del asiento y que la superficie de la habitación no se vea perjudicada.
- Ruedas de calidad: debe tener ruedas fabricadas con materiales suaves, como goma, silicona o poliuretano, que sean menos propensas a rayar o marcar.
- Base estable: es recomendable que tenga base ancha y estable para distribuir el peso de manera uniforme y reducir la presión sobre el suelo.
- Patas protegidas: las patas recubiertas de fieltro u otros materiales suaves evitan que raspen o marquen la superficie.
- Superficies lisas: procura que no tengan piezas metálicas sobresalientes o ásperas que provoquen daños al arrastrarse.
- Calidad de construcción: valora que esté fabricada con materiales duraderos y de alta calidad que soporten el peso del usuario sin lastimar el piso.
Factores que contribuyen al daño de los suelos
Los principales factores que provocan que las sillas de escritorio susciten daños en el suelo son:
- Material de las ruedas o patas: las ruedas desgastadas o fabricadas con materiales abrasivos provocan arañazos y marcas.
- Peso del usuario: cuanto mayor sea el peso del usuario, mayor será la presión ejercida sobre el piso, aumentando el riesgo de deterioro.
- Tipo de suelo: los la madera blanda y de vinilo son más susceptibles al desperfecto que otros materiales como el hormigón o la cerámica.
- Actividad realizada: el tipo de movimiento realizado mientras se está sentado, como el desplazamiento lateral o el balanceo constante, aumenta la probabilidad de producir un desperfecto en el piso.
- Mantenimiento del suelo: una conservación deficiente de la superficie, con imperfecciones o grietas, multiplica las opciones de sufrir estragos por el uso de sillas de oficina ergonómicas.
Tipos de suelos y su resistencia
Suelos de madera dura
Las sillas de oficina estropean los pisos de madera dura si no se toman precauciones adecuadas. Las ruedas o las patas de metal pueden rayar la superficie, dejando marcas visibles y desgaste.
Consejos para proteger los suelos de madera:
- Utiliza sillas con ruedas de goma, silicona o recubiertas de material suave para reducir el riesgo de arañazos. No deben ser de plástico duro.
- Coloca tapetes o alfombrillas protectoras debajo para proporcionar una barrera adicional de seguridad.
- Mantén las ruedas limpias y libres de suciedad y residuos que ocasionen abrasión en la madera.
- Realiza un mantenimiento regular, como aplicar capas de sellador o pulir según sea necesario, para protegerlo y mantener su brillo.
Suelos de madera blanda
Los de madera blanda, como el pino o el abeto, son más susceptibles al estropicio causado por las ruedas o las patas, que pueden hundirse dejando marcas permanentes o incluso provocando abolladuras.
Consejos para proteger los suelos de madera blanda:
- Opta por modelos con ruedas anchas y suaves para distribuir el peso de manera más uniforme y reducir la presión sobre la madera.
- Coloca protectores de fieltro en las patas para impedir que rayen o marquen la superficie al desplazarse.
- Evita arrastrar las sillas; levántalas ligeramente al moverlas para reducir el riesgo de daños.
Suelos de azulejos y cerámica
Los pisos de azulejos y cerámica son generalmente más resistentes. Sin embargo, las ruedas sucias o abrasivas aún rasquen la superficie y dejar marcas visibles.
Consejos para proteger los suelos de azulejos y cerámica:
- Utiliza ruedas de goma o material suave para minimizar el riesgo de arañazos.
- Límpialas regularmente para impedir que la suciedad y los residuos abrasivos afecten a la superficie.
- Considera colocar alfombras protectoras en áreas de alto tráfico para aumentar la protección.
Suelos de vinilo y linóleo
Los de vinilo y linóleo son relativamente resistentes a los estropicios originados por las sillas de oficina. Pero ten en cuenta que las ruedas sucias o desgastadas dejan marcas superficiales.
Consejos para proteger los suelos de vinilo y linóleo:
- Utiliza ruedas suaves y limpias para minimizar el peligro de desperfectos.
- No arrastres las sillas; levántalas ligeramente al moverlas para reducir el desgaste.
Suelos de moqueta y alfombra
Estropean la moqueta y alfombras si no se utilizan protectores adecuados en las ruedas o las patas. El constante movimiento causa aplastamiento de las fibras y desgaste prematuro.
Consejos para proteger los suelos de moqueta y alfombra:
- Utiliza protectores debajo de las sillas para distribuir el peso y reducir la presión sobre el tapiz.
- Limpia regularmente la alfombra para eliminar la suciedad y los residuos que produzcan abrasión en las ruedas.
- Considera utilizar sillas con bases anchas y estables para minimizar el hundimiento y reducir el desgaste.
¿Qué medidas tomar para prevenir desperfectos causados por sillas de escritorio?
El cuidado preventivo es fundamental para proteger el suelo de la oficina de los desperfectos originados por las sillas de escritorio.
Elegir las ruedas adecuadas
Optar por ruedas de silicona en lugar de plástico duro reduce el riesgo de estropear el suelo.
Las de silicona son más suaves, están diseñadas para uso en interiores y son menos propensas a dejar marcas en superficies sensibles como la madera o el laminado.
Alfombrillas protectoras
Colocar alfombrillas protectoras es una estrategia efectiva para prevenir arañazos, hendiduras y abrasiones.
Los tapetes actúan como una barrera entre las ruedas y la superficie, absorbiendo el impacto y distribuyendo el peso de manera uniforme.
Acostumbran a ser transparentes. Verifica que sea suficientemente grande para cubrir el área donde se moverá la silla con facilidad.
Inspección periódica
Revisa regularmente tanto el mueble como el suelo en busca de signos de desgaste o daño. Si notas alguna incidencia, como ruedas desgastadas o áreas rayadas, actúa de inmediato para remediar la situación y prevenir estragos mayores.
Mantener las ruedas limpias
La suciedad y los residuos atrapados en los discos actúan como abrasivos y causan perjuicios al moverla. Es importante mantener limpias tanto las ruedas, como la superficie del suelo y que esté despejado de objetos.
Así que, periódicamente, límpialas y barre o aspira la estancia para eliminar cualquier partícula que provoque fricción.
Evitar arrastrar las sillas
Arrastrar las sillas es una mala costumbre. El movimiento brusco y la fricción rayan e incluso desprender el acabado de la superficie. En su lugar, levántala ligeramente al moverla para no tener este contratiempo.
También es recomendable alzarla cuando se cambia de dirección en lugar de girar sobre las ruedas.
Revisar regularmente el estado del suelo
Mirarlo a menudo permite identificar cualquier perjuicio o desgaste temprano. Cuanto antes se detecten los problemas, más fácil será solucionarlos e impedir desperfectos mayores.
Cómo reparar los daños causados en el suelo
En muchas ocasiones es posible reparar los daños causados por sillas de oficina. Siempre es importante abordar los estropicios tan pronto como sean detectados para obstaculizar que empeoren.
Si son extensos o difíciles de reparar, es recomendable contactar con profesionales para obtener los mejores resultados.
A continuación encontrarás algunas formas para llegar a una solución:
Rayones en suelos de madera
Lijado y acabado: para arañazos superficiales, es posible lijar ligeramente el área afectada y aplicar una capa de acabado para restaurar el aspecto original.
Relleno de grietas: en caso de marcas más profundas o grietas, utiliza un relleno de madera compatible con el color del suelo para llenar el área deteriorada antes de aplicar el acabado.
Marcas de presión en suelos laminados
Reemplazo de tablas: en casos graves de marcas de presión o daños estructurales en espacios laminados, puede ser necesario reemplazar las tablas afectadas para restaurar la integridad.
Reparación de laminado: para estropicios menores, emplea una solución de reparación de laminado para llenar las marcas de presión y restaurar la apariencia.
Daños en alfombras
Parches de reparación: para áreas damnificadas, utiliza kits de parches de reparación que incluyen un remiendo de tela y adhesivo para restaurar la integridad de la alfombra.
Limpieza profesional: en caso de manchas difíciles o estropicios extensos, será necesario recurrir a servicios de limpieza profesional para restaurar la apariencia del tapiz.