En una oficina en casa un escritorio regulable en altura eléctrico se convierte en una pieza fundamental para desarrollar las tareas profesionales. Es un mueble que proporciona las características ergonómicas para desarrollar una postura corporal correcta durante la jornada laboral.
Una mesa eléctrica elevable es una herramienta excelente en la lucha contra el sedentarismo porque facilita acabar con el exceso de horas de estar sentado. Tiene beneficios en la salud y también en la productividad.
Un escritorio ajustable eléctrico sube y baja con tan solo tocar un botón. Se adapta a tus necesidades. Para que no surja ningún problema debes realizar un buen uso y tener la responsabilidad.
Por eso es importante conocer las funciones y configuraciones del producto. Se puede producir algún fallo, por lo que es preciso encontrar el problema y la solución.
Razones por las que un escritorio eléctrico de altura regulable no sube
Existen incidencias que se pueden producir en un escritorio regulable en altura eléctrico, que no permiten que tenga movimiento y pueda subir y bajar con normalidad. En la mayor parte de las ocasiones son problemas que se pueden solucionar de forma rápida.
Exceso de peso
Cada escritorio de pie en su fabricación tiene unas características de soportar una cifra máxima de peso. Cuando se supera este límite en la superficie se apaga porque no tiene capacidad para elevarse, ya que si fuerza el mecanismo hay un riesgo evidente que se dañen los motores.
Ten en cuenta la capacidad máxima de carga para no tener problemas. Si lo fuerzas reduces su vida útil. Todo lo que no necesites no lo tengas sobre la base. De esta manera además también tendrás más espacio de trabajo, un factor positivo porque el orden favorece la productividad.
Pérdida de energía
Los escritorios eléctricos están enchufados a la corriente porque necesitan electricidad para realizar el movimiento. Para saber si es un problema de energía verifica que el cable no se haya desconectado o no esté lo suficientemente bien enchufado.
Si no tiene suficiente electricidad el escritorio se pone en modo reposo y debes proceder a realizar un reinicio manual. Debes tener un sistema de gestión de cables adecuado para prevenir este tipo de problemas.
Caja de control agotada
La caja de control que posee el mueble tiene un ciclo de trabajo, que son las veces que sube y baja en una misma sesión de manera continuada. Si lo supera se sitúa automáticamente en modo reposo.
Este límite es un sistema que introduce el fabricante para que no se produzca un sobrecalentamiento, se produzcan daños graves y acorte la vida útil del mueble.
El tiempo activo depende de cada modelo. La mayoría de cajas de control permanece 2 minutos encendida y 18 en descanso. La mejor opción es esperar a que transcurra el tiempo hasta que vuelva a estar activa.
Mecanismo obstaculizado
Puede ser que algún objeto obstaculice el mecanismo que permita al escritorio subir y bajar. Comprueba que no haya ningún impedimento para que haga el movimiento, así como algún mueble o saliente que se haya desplazado y que sea una traba, o los causantes sean los apoyabrazos de la silla.
Existen escritorios con una función de seguridad y se detienen cuando detectan un objeto. Haz la comprobación que no hay ningún artículo en medio. Si está presente retíralo y vuelve a probar si puedes realizar la acción para elevar o descender la superficie de la mesa.
Desigualdad de altura
Algunos modelos de escritorios eléctricos tienen ajustes con dos o más motores que elevan la superficie de manera independiente para controlar un juego de patas y no hacerlo todas a la vez. Esto supone un riesgo para que se produzca una desigualdad de altura.
Si los motores no están sincronizados provocan que las patas se encuentren desniveladas y que la caja de control bloquee el sistema como medida de seguridad. Deja de funcionar porque se mueven a diferentes velocidades. O uno está parado y el otro continúa girando.
Si no detecta esta incidencia provoca una fricción en las columnas que hacen que se atasquen. En estos casos restablece el escritorio para que las patas se vuelvan a quedar alineadas y no se produzca ninguna situación de desnivel en la mesa eléctrica regulable.
En todos estos casos, si persisten los problemas es preciso ponerse en contacto con el departamento de atención al cliente del fabricante o la empresa que te ha vendido el mueble para que procedan a arraglarlo.
Cómo hacer un reinicio manual de una mesa de altura ajustable
Para realizar el reinicio manual consulta primero la guía de instrucciones, aunque para la mayoría de los modelos el sistema que presentamos a continuación es compatible.
- En primera instancia debes desconectar el cable de alimentación durante un espacio de tiempo de 30 segundos.
- Una vez cumplido este periodo vuelve a conectarlo a la toma de corriente.
- Presiona y mantén presionado el botón de abajo hasta que la superficie llegue a su altura más baja.
- Suelta el botón. Se elevará levemente y se parará.
- Ya está listo para volver a utilizarse.
¿Cómo utilizar correctamente un escritorio eléctrico de altura ajustable?
Un escritorio de altura regulable es un mueble con motores eléctricos, aunque también existen modelos con un sistema de movimiento manual. En los dos procedimientos hay un engranaje para hacer subir y bajar la base.
Por este motivo es del todo necesario realizarle un mantenimiento y hacer un buen uso, para que su vida útil se alargue en el tiempo sin incidencias. Es una parte importante en la oficina en casa para realizar teletrabajo y debe cuidarse con esmero.
Un escritorio eléctrico ajustable tiene funciones de memoria para realizar arreglos individuales, como la altura a la que quieres estar situado tanto cuando te encuentras de pie como sentado, para tener la máxima comodidad y mantener una postura corporal correcta.
Ten en cuenta que toma tiempo acostumbrarse a una mesa de altura ajustable. Tienes que combinar periodos de tiempo erguido con otras sentado, siempre manteniendo una posición del cuerpo correcta, con la espalda recta sin encorvarse, los codos en un ángulo de 90 grados, los pies bien apoyados al suelo y la pantalla del ordenador a una distancia adecuada.
Las características de ergonomía que posee proporcionan una mejor postura adecuada ante el ordenador, disminuye la fatiga, el dolor en músculos, piernas y columna vertebral; reduce la fatiga física, estimula la circulación, el ritmo cardiaco y el rendimiento cerebral.
Además un escritorio de altura ajustable favorece la concentración y la productividad, que son facetas fundamentales para trabajar desde casa.